1.37.10.22: La papisa abre el libro con la muerte del papa y el recuerdo del tiempo femenino

Queridas y queridos sincronautas:
Esta heptada se vio marcada por una sacudida sincrónica de alto voltaje: la muerte del Papa Francisco I, KIN 23 Noche Planetaria Azul. Un acontecimiento que no solo cierra un ciclo dentro de la jerarquía vaticana, sino que abre una grieta significativa en la lectura sincronológica del tiempo.

En el Tarot, desde el orden de los arcanos mayores, la primera figura que aparece no es el Papa, sino la Papisa. Entendiendo que el Mago, el Arcano I, es considerado un ser andrógino que representa el inicio de la manifestación, la Papisa, como Arcano II, introduce la sabiduría contenida en lo oculto, el conocimiento trascendental que debe ser comprendido antes de que pueda ser expresado o proyectado al mundo, desde el libro de los registros akáshicos. La figura de la Papisa es, entonces, la primera figura femenina que precede al despliegue de la creación y continúa al poder andrógino que se representa en el Mago.

¿Qué significa entonces, que se cierre el ciclo de un Papa y no haya existido jamás su contraparte femenina en el trono del Vaticano? Desde la perspectiva del orden sincrónico, esto revela un desequilibrio espiritual profundo. Si el tiempo natural se rige por las 13 lunas de 28 días —perfectamente alineadas con el ciclo menstrual femenino—, entonces, el tiempo mismo es femenino. Esta clave, ignorada y olvidada por milenios, devuelve a la mujer su lugar como portadora de la frecuencia original, de la conexión directa con lo cíclico, lo lunar, lo intuitivo.
La espiritualidad institucionalizada, al negar a la mujer un rol protagónico, ha mutilado su propia esencia. La figura de la Papisa no es un símbolo menor: es la guardiana de los misterios, la portadora del libro oculto, el puente entre el mundo visible y lo invisible. Mientras tanto, el mundo sigue aferrado a arquetipos masculinos de poder y dominio, lo que se refleja brutalmente en la deriva actual: Occidente, en un acto de incoherencia alarmante, se alía militarmente con Israel mientras estallan bombas en Ucrania y se multiplican los contratos de armas. Las noticias van y vienen como olas mediáticas: un escándalo borra al anterior. Nadie habla ya de aranceles ni de causas profundas, hasta próximamente… Solo quedan los titulares y el miedo, ese miedo manufacturado que mantiene a las masas en la frecuencia del caos. Pero la muerte del Papa en KIN 28 Estrella Lunar Amarilla, apenas días después del lanzamiento del video “🌀 ¿Quién fue Lloydine Burris? 🌀”, no es una coincidencia cualquiera sino una sincronicidad.
Lloydine Burris, KIN 22 Viento Solar Blanco, fue la co-creadora del Encantamiento del Sueño y madre del calendario de las 13 lunas. Su KIN, que precede directamente al del Papa, codifica no solo el aliento divino que inspira el espíritu, sino también los 22 arcanos mayores del Tarot. Es como si el orden sincrónico gritara con claridad: antes del Papa, viene la Papisa. Antes del ruido del dogma, está el susurro del viento sagrado que trae la verdad. Y esa verdad tiene rostro femenino.

Esta heptada no solo ha sido una bisagra entre la vieja espiritualidad patriarcal y el nuevo tiempo del alma: ha sido un espejo. Un reflejo nítido de lo que urge restaurar. No es tiempo de elegir entre lo masculino o lo femenino, sino de devolverle al espíritu su integridad. Lo que está fragmentado debe volver a unirse. Y para ello, debemos permitir que la Papisa, en sus múltiples formas —Lloydine, la luna, la madre cósmica, la voz interna— vuelva a ocupar el lugar que le corresponde en el altar de nuestra conciencia.
En la meditación se transforma la iluminación, y en la escucha profunda de lo femenino se revela el nuevo camino. El tiempo es ahora. Y el ahora es femenino.
Atentamente,
Maya Galáctico 999.